Madrid es una ciudad para vivirla desde las alturas, soñando con ese azulado océano que cubre la ciudad con su luz de día y sus estrellas de noche. Las azoteas de Madrid tienen duende. Nos transportan a esos cielos que tanto brillan en los cuadros de Velázquez o de Goya mientras disfrutas de platos insospechados, buena música y los cócteles más sugerentes. Una experiencia celestial a través de 20 lugares donde tocar el cielo de Madrid con tus manos.
The Principal, ecos de la Gran Vía
Calle Marqués de Valdeiglesias, 1 – 915 21 87 43
The Principal es un postal idílica de Madrid. Ajeno a ese fascinante escenario arquitectónico y humano que transcurre a sus pies, The Principal es la nota de distinción que le faltaba a ese lugar privilegiado. En frente se encuentra el comienzo de Gran Vía, el edificio Metrópolis y el Círculo de Bellas Artes y su Palas vigilante.
Ese escenario tan elocuente es sólo un envoltorio para una noche que debe empezar al atardecer. El dorado y el tono cobrizo de la puesta de sol de Gran Vía es un espectáculo inimitable. El estilo de la azotea acoge un espacio creado para perderse en él, sentir la brisa de la calle y disfrutar de un buen cóctel a la sombra de un ciprés o de un olivo. Esta fabulosa puesta en escena es el comienzo de un festín regado por un cóctel inesperado: Quizás un Brazil Mule, un Brandon Lee o un seductor Rossini. La carta nos trae del cielo una deliciosa Burrata de pesto con brotes tiernos, un increíble Tataki de atún, camarones crujientes y verdura y un helado artesanal a modo de broche de oro. Cuando bajas de este lugar y te pierdes en la Gran Vía, te das cuenta que desde las alturas todo se ve de distinta manera.
Nice To Meet You, abrazado a Madrid
Gran Vía, 80, planta 14 – 638908559
En Nice To Meet You, Madrid te abraza. Esa sensación te acompaña en una azotea donde la ciudad te envuelve a través de una espléndida panorámica de 360º. Desde sus alturas merece deleitarse con las sinuosas formas del Madrid de los Austrias, la Plaza de España, Gran Vía, Conde Duque, Malasaña e incluso con el verdor de la Casa de Campo. Más allá de sus vistas espectaculares, Dear es un hotel urbano que transmite juventud y frescor. Concebido como el jardín de una imponente y perpetua piscina, sugiere confort y estilo en su carta y a través de su idílico entorno diseñado por el reconocido Tarruela French Studio. Sabores de autor se entremezclan en sus noches con una buena selección de chill out llevada a cabo por djs en directo y una interesante carta de cócteles.
Su cocina responde a las tendencias con platos sutiles basados en una cocina muy cosmopolita. Su carta no deja de sorprender en su recorrido alternativo por las recetas más trendy. El tartar de tomate, las croquetas de cigala, el prensado de foie, el mollete taiwanés o postres como el super de chocolate referencian la cómoda y seductora gastronomía de un lugar pensado para disfrutar en 360º.
Argo, una azotea exclusiva
Plaza Santa Ana, 7 – 91 415 39 40
Madrid oculta secretos solo accesibles para quiénes saben lo que buscan. Fundado por el hostelero Diego Ortiz y sus socios, este club multidisciplinar con más de 1000 metros cuadrados y 5 plantas, aspira a ser un centro gastronómico y de ocio de referencia en Madrid. Todo tipo de artes tienen cabida en Argo, desde catas de vino o de café a microteatro o exposiciones. Un auténtico #placetobe.
Para disfrutar de su espectacular terraza en la plaza de Santa Ana hay que ser socio y aceptar el humo como acompañante. Este sofisticado smoking club cuenta entre los fogones con las sabias manos de Iñaki Camba. Una velada VIP, en la que descubrir la exclusividad bien entendida.
The Hat, nuestro lado más canalla
Calle Imperial, 9, 28005 Madrid – 917 72 85 72
Hay lugares que trascienden más allá de su estética. Suelen convertirse en refugio de inconformistas que buscan un toque de distinción. El concepto joven de este hostal rompe con los estereotipos creados en torno a estos locales. En The Hat se mima el detalle externo y aquel que no se ve a simple vista. En las entrañas de este refinado lugar, el consumo energético se alimenta, en parte, de los desperdicios de sus huéspedes gracias a una estación de biomasa. Su azotea saluda a Madrid, irreverente, muy casual pero totalmente hipnótica.
La cúpula de la Colegiata y los tejados de Tirso y de La Latina dibujan un paisaje paradigmático de Madrid justo delante de la mesa. Su decoración desnuda un espacio pensado para olvidar el ruido de la ciudad y saborear el momento rodeado de una cálida y acogedora decoración de madera. Allí, emerge una cocina ideada para compartir y divertirse. Aquí las formas las marcas tú. Es parte de ese carácter indomable del lugar representado en platos emblemáticos de la comfort food (tostas, quiche, tortilla). Tras saciar nuestra pasión foodie, el aire de la tarde nos acompaña al invernadero que se encuentra en lado opuesto de la azotea. Entre cócteles y buenos vinos brindamos por otra noche en las alturas.
La terraza del Óscar, entre dos cielos
Plaza Pedro Zerolo, 12 – 917 01 11 73
Dicen los marinos que estar en alta mar es como situarse entre dos cristalinos cielos. Se trata de una experiencia única que también se puede disfrutar en Madrid. La terraza del hotel Óscar es un oasis azul en medio del asfalto. Su piscina acristalada llena de matices acuáticos una terraza muy ibicenca creada por Tomás Alía, con cómodos sofás de cuero, música ambient y camas balinesas en las que recostarse y disfrutar el espectáculo azulado que sucede ante nuestros ojos. El cielo de Madrid te sobrecoge en esta azotea y se precipita sobre uno sin otra barrera que la propia brisa de la ciudad. El edificio Telefónica emerge de ese azul perpetuo mientras Chueca posa sin filtros.
Ante semejante panorámica celestial aparece otra más terrenal que no desmerece. La cocina del Óscar sobrevuela cada mes una cocina concreta, por lo que su carta nunca es la misma. Ni lo son las diferentes actividades culturales y de ocio que ha desarrollado desde su inauguración, dando cabida desde maridajes de todo tipo hasta microteatro, sin olvidarnos de su irresistible brunch. Cada visita a este idílico lugar siempre es diferente y nos hace desear repetir los momentos irrepetibles.
Penthouse – Hotel Me, un clásico muy cool
Plaza Santa Ana, 14 – 917016000
En el barrio de Las Letras, todos los versos nos llevan a la azotea del Hotel Me. Penthouse se ha convertido en un clásico de la zona desde hace diez años. Al margen de una abundante y cuidada programación musical y de su bohemia panorámica, este paradísiaco lugar ofrece diversos espacios al aire libre o bajo una espectacular cristalera. Sobre la torre del edificio se proyectan en ocasiones piezas de video art.
Sobre sus cómodas camas, desfilan algunos de los cócteles más selectos de la ciudad. Todo está pensado para disfrutar una fiesta continua con sesiones de djs como Nicola Baldacci, que hace latir en directo los corazones de 250 personas. Su oferta gastronómica es interesante y contiene platos inesperados en una fiesta, como los calamares con alioli de Yuzu o la reducción Pedro Ximénez de sus bombones de foie. En la fiesta más glamorosa de Madrid la ambrosía lleva nombre de cóctel. El Penthouse ofrece veinte iconos de la coctelería para endulzar una noche cosmopolita sobre el cielo más literario de la capital.
El Jardín de Salvador Bachiller, un jardín oculto
Montera, 7 – 915310260
Este lugar con encanto inigualable se esconde de los madrileños en una tienda de decoración. La marca Salvador Bachiller ha llevado a otro nivel el concepto flagship con una decoración que nos transporta a los cuentos de los hermanos Grimm y un concepto culinario sencillo e irresistible.
Cualquier momento del día encuentra su acomodo en este jardín. Los desayunos con bollería artesanal y una selecta carta de tés son un puro placer para sonámbulos y madrugadores. Al mediodía tienes la excusa perfecta para ocupar el lugar con un extenso y completo brunch de cocina internacional. Durante la tarde, el pistoletazo de salida a una tarde de cañas con una cerveza artesanal por parejas o grupos de amigos. Es el momento de probar ese gazpacho de fresa tan especial o sucumbir a la tentación del coulant de chocolate. Cuando echas el último vistazo a tu alrededor tienes la seguridad de convertir este lugar en tu rincón secreto de la ciudad.
Mercado de San Antón, un encuentro con la vieja y la nueva Chueca
Augusto Figueroa, 24 – 913 30 07 30
La azotea de este mercado es pura fantasía. En ella redescubrirás el sabor de toda la vida en medio de la Chueca más vanguardista. Las tejas de la mítica plaza se fusionan con el entorno acogedor de la azotea y su carta nos transporta a viejos sabores con nuevas formas y texturas.
Su elegante carta de ibéricos destapa el tarro de las esencias y nos sumerge en el sabor de un wok de verduras, de una ensalada de higos con queso de cabra y cítricos, o de un salmón a la japonesa con espuma de wasabi. Atentos también a su carta de zumos depurativos que dan el pistoletazo de salida al verano. Al aire libre, tampoco faltan los cócteles (el mojito es un must). Una manera muy sensorial de experimentar el sabor de la nueva y de la vieja Chueca.
La Casa Encendida, la azotea culta
Ronda de Valencia, 2 – 902 43 03 22
La terraza de La Casa Encendida crea los veranos soñados. En pocos lugares puedes tomar una cerveza fría en un entorno creativo y vanguardista, donde proyecten películas icónicas o actúen creativos músicos. La programación cultural de esta azotea se ha convertido en indispensable para entender el verano en Madrid. Todos el mundo tiene una buena excusa para terminar allí.
El cine de verano con más estilo nos deleita un año más con sus Marcianadas, un ciclo muy divertido de ciencia – ficción. Pero el espíritu aventurero de esta culta azotea nos obsequia además con un ciclo de conciertos y eventos culturales que se prolongarán durante todas las tardes y noches de verano. Estaremos atentos a su programación cultural.
El Paracaidista, la última en llegar
La Palma, 10 – 603 30 91 73
El Paracaidista aterriza en Madrid con ganas de hacerse notar. En esta concept store que destila tendencias por donde se respire, conviven showrooms de algunas marcas deportivas, un espacio gourmet muy rompedor, un cine-café que programa cine independiente, tiendas de diseñadores noveles, galerías de arte y unas cuantas cosas más. Todo un centro cultural que aspira a ser tendencia en la ciudad.
Su concepto casual y urbano emparenta con el espíritu de Malasaña, que muy probablemente se dejará seducir por su golosa variedad de pizzas gourmet y sus postres artesanos. Su variada carta incluye platos más sofisticados como el blue finn o su exquisito pulled pork asian style. Aún es pronto para evaluar el impacto de El Paracaidista en un barrio como Malasaña. Por sus primeros días, apostamos a que se convertirá en un must.
BONUS TRACK
Med Rooftops, una caricia de aire mediterráneo
Diversas ubicaciones – Inscripciones aquí
Al fin llegan las brisas marinas a Madrid de la mano de la ginebra mediterránea Gin Mare. El olor a mar inundará las azoteas privadas más bellas de Madrid en junio y septiembre.
Es una experiencia que está llevando el Mediterráneo a lugares como Nueva York, Londres o Lisboa a casas de personas muy selectas. En Madrid, el dueño de idealista ha sido uno de los partenaires. Los productos mediterráneos reinan en una mesa destinada a vivir un terrace sharing, un concepto novedoso aún en España pero con grandes adeptos en todo el mundo. Por unas horas coquetearemos con el skyline de Madrid disfrutando de las vistas, buena música, cocina mediterránea y un sabroso Gin Mare.
Éste viaje por el cielo de Madrid ha sido el preludio de una segunda parte que ya estamos preparando y que publicaremos muy pronto. Nos apasiona asomarnos a las vistas y los sabores más trendy de la ciudad.
Muchas gracias por tan buenas sugerencias, las iré visitando y anexaré mis opiniones. Los felicito por las notas y recomendaciones que con tan buen gusto nos «seducen «. Abrazos Vittorio