Hace unos días recibí una invitación misteriosa. No me decían hora ni lugar de encuentro, sólo me adelantaban que lo pasaríamos en grande y que brindaríamos con buenas cervezas. ¡Oh, sorpresa! Un par de días antes de la cita, tuve la certeza absoluta: Alhambra Reserva 1925 organizaba otra de sus fiestas clandestinas en Madrid. Bajo el lema «Arte por descubrir» la diversión estaba asegurada.
La noche transcurrió en un loft secreto del barrio de La Latina. Disfrutamos de una pintura en directo a cargo de Jorge Fernández Valdés, el imprescindible catering de Samantha de España, un dúo de violín y piano, un DJ que no cesaba de pinchar temazos para darle música a la velada. Y por supuesto, Alhambra 1925, muchas de ellas…lager, verdes, fresquitas y siempre especiales para brindar con amigos.
Ambientazo, gente guapa, música, comida exquisita… Un regalo anticipado de Navidad para todos los que nos declaramos fans del arte y de la buena cerveza. Entre brindis y risas, Jorge iba modelando una preciosa réplica de la botella en un cuadro gigante, lleno de verdes y matices. Lo terminó en 4 horas y, sin duda, fue la obra de arte de la noche. #ArtePorDescubrir y más, siempre más.
Hace años probé la Alhambra Reserva 1925 y desde ese momento pasó a formar parte de mi bitácora cervecera personal. Me gustan su sabor, su color y su historia. Cada vez que la saboreo es como tener un pedacito de Granada en Madrid…hay maestría y leyenda, calidad y elegancia.
Para rendirle homenaje y darla a conocer en muchos lugares, las fiestas clandestinas de Alhambra 1925 se han convertido en un ritual que recorre España. Apetece repetirlo una y otra vez. Hay que estar atentos a las próximas que celebren en Madrid y podéis seguir sus pasos y enteraros de cómo asistir en sus redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram.
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